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No se conocen muchas obras literarias dedicadas exclusivamente al Rastro hasta el siglo XX salvo algunos sainetes. En 1697, Armesto y Casto escribió Las vendedoras de la Puerta del Rastro. Ramón de la Cruz, en el siglo XVIII, estrenó la obra teatral picaresca “El Rastro por la mañana”. López Silva y Carlos Arniches escribieron varios sainetes cuya acción se desarrolla en este lugar y estos autores tienen una calle del Rastro que lleva su nombre. Sin embargo, muchos autores desde siglos anteriores hacían referencias al mercado. Citaremos entre ellos a Cervantes, Lope de Vega, Quevedo, Covarrubias. En el siglo XIX, Mesonero Romanos y Fernández de los Ríos hacen descripciones del Rastro en sus obras. Pío Baroja hace un relato encantador de sus novillos escolares en el mercado. Una pintora y escritora de Paris, aristócrata de origen ruso, Maria Bashkirtseff, hizo un viaje a España en 1881 y en su diario dedica una amplia página al Rastro de Madrid que le hizo un efecto impactante. Como es poco conocida como escritora por haber fallecido de tuberculosis a los 24 años y deseaba que su diario fuera conocido después de su muerte, dedicaremos unas líneas a su descripción personal del Rastro:
Para
quién se interesa por la historia del Rastro, estos testimonios
y referencias son importantes porque aportan un testimonio sobre la evolución
del mercado a través de los siglos. |
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En el siglo XX, exactamente en el año 1914, Ramón Gómez de la Serna publica su extensa obra “El Rastro”. Aparecerán varias ediciones sucesivas. El autor ofrece una visión muy personal del viejo mercado madrileño donde paseaba muy a menudo. Su prosa es poética, un poco hermética, y refleja el mundo interior del escritor dentro de este otro mundo que es el Rastro. En 1961, el cineasta Carlos Saura hizo fotografías en blanco y negro para ilustrar el libro de Gómez de la Serna. Estas fotografías también ofrecen una visión artística muy original del mercado. Antonio
Corral y Luis Carandell en 1984 publicaron una obra en
común “El Rastro”. Nos
gustaría recomendar una obra histórica más que literaria,
publicada en 1996, “El Rastro” de
Mª Isabel Gea Ortigas que, a nuestro entender, es la más
completa de todas a pesar de ser editada en libro de bolsillo. Es el fruto
de la búsqueda incansable de una gran conocedora de la Villa de
Madrid que pone a nuestro alcance un estudio preciso del Rastro desde
sus más lejanos orígenes hasta hoy. |
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